jueves, 8 de noviembre de 2012

Una mala noche en Escocia

Europa es otra cosa, eso quedo demostrado anoche en el Celtic Park, el Barcelona se presentaba allí como líder invicto del grupo G y todo hacía presagiar una victoria del equipo azulgrana… El equipo escocés planto el autobús y se encomendó a la suerte, su portero, los pelotazos a sus delanteros y al balón parado; sorprendentemente la apuesta le salió impecable (2-1). A destacar el IMPRESIONANTE ambiente del estadio.
El Barça dominó el encuentro de principio a fin, se adueño del balón como hace siempre y convirtió el partido en un choque tipo balonmano (todo entorno al área del Celtic), mereció ganar de sobras. Fue muy parecido a lo que se vio el año pasado contra el Chelsea, el equipo catalán dispuso de las mejores oportunidades, pero los palos y la actuación del portero rival acabaron por frustrar al club español. Para más desgracia, el equipo local rentabilizo al máximo sus aproximaciones a Valdes, un gol de córner en la primera parte y en la segunda otro gol después de saque de su propio portero. El tanto de Messi (siempre Messi) en los instantes finales solo sirvió para maquillar el resultado.
Sorprende que el Barcelona este año en Europa le cuesta sacar adelante este tipo de partidos, donde el oponente se encierra atrás y aprovecha los espacios a la contra. El principal problema es sin duda la defensa barcelonista, esta encajando muchos más goles de los deseados y debido a las lesiones y bajo rendimiento de algunos jugadores deja cada partido una imagen preocupante de debilidad en su zaga.
Simplemente fue una mala noche, pero esto tiene que servir de aviso a Vilanova, este tipo de errores defensivos son decisivos a partir de octavos de final; por lo demás nada preocupante, el Barça será primero de grupo sin problemas.

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